domingo, 9 de septiembre de 2012

¿Cuántas Yo'es se necesita para llegar al chiclocentro?

Estoy enojada. Iba a escribir un post hiper inspirador sobre el bien y el mal y todos los estúpidos clichés de mierda que con ellos van relacionados. Cosas como oscuro, luminoso.... distante y cercano... ¿Sabes?

Nonsense.

Camino a acá, sin embargo, algo altero mi mood elevado cuasi iluminado filosófico charlatán y pues nada, que ahora, irónicamente, requiero una catársis.

Que este es mi blog y aquí se hace lo que yo diga.

miércoles, 18 de abril de 2012

¿Qué tienen en común: Radiohead, Krispy Kreme y la autopista -México-Toluca?

Normalmente nada, pero ayer no fue un día normal. Lo que compartieron ayer esas tres cosas fui yo. Yo y mi incansable instinto de aventura, por decirlo de manera bonita.

La realidad es que a) Yo ya tenía apalabrado con Daniel un boleto para Radiohead b) Quería ir con Boy para festejar nuestro aniversario, que es mañana, y c) No tenía ni puta idea de donde iba a sacar el otro boleto hasta un día antes.

Total que gracias a un tuitero, según yo ya había conseguido el boleto faltante… ERROR!

Pero vayamos como dice el buen Jack, por partes.

B llegó tipo a las 4, claro que hasta ese momento todo pintaba bien, pero nos retrasó el maldito banco del demonio, cuando una llamada "corta" se tranformó en una de más de media hora con más de 3 empleados de dicha Institución Bancaria, qchsptm.

En fin, que para brincar el tráfico que se hace para bajar de Santa Fe hay que pasar antes de las 5.30 y a esa hora apenas íbamos saliendo de la casa.

Dos horas y muchos minutos después, gracias en parte a la lluvia impertinente en hora pico en el DF que no extraño nada nadita, llegamos apenas a donde planeamos dejar la camioneta, porque es bien sabido como se pone la estacionada en un concierto multitudinario por esa zona, en fin.

Dejamos por fin la camioneta en un estacionamiento y abordamos el metro, que por la lluvia ¿porqué no? Iba atascado y parándose. Para ese entonces las dos personas con las que había quedado para lo de los boletos ya estaban allá y esperándome. Y yo así :@

Cuando por fin, llegamos a Velódromo, salimos corriendo… esperen un momento, CLARO el Foro Sol no está en Velódromo, nos habíamos bajado una estación antes, y ahí van de regreso al metro. Casi las 9 cuando por fin llegamos al Foro Sol.

El Plus? Las líneas celulares saturadas hasta la madre. Nunca entró mi llamada, y nunca, léase nunca, encontré a las personas que me iban a vender el boleto. Bendita tecnología.

9.30 y apenas encontré a Daniel, él muy lindo (como siempre, sorry Dano por hacer que te perdieras a Caribou!) pese a mi tardanza estuvo en el lugar acordado y ahí espero. Listo! Un boleto, one to go… Ya nada más faltaba el otro, y las líneas telefónicas inaccesibles, mensajes y nada.

Total dan las 10 y decido comprar uno ya en la reventa ínguesú… Y casi como caído del cielo estaba parado este señor que nos ofrece el boleto faltante al costo. Después de 5 minutos ya estábamos los dos adentro, al fin!

Y ahí si ya adentro entraron todos los mensajes y las llamada… Pero ¿YA PARA QUÉ? Ni modo pues.

El concierto fue espectacular, si quieren detalles es mejor que lean una reseña en otro lado, yo vengo aquí para contar el antes y el después… Reseña de Rock and Radio

En fin, acaba el concierto pasadas las 12, y ya bien elevadísimos por el tufo de nuestros amables vecinos que a juzgar por el olor, no estaban precisamente siendo "verdes" si no más bien quemando una mezcla bastante extraña, plástico quemado, como acidito y que revuelve el estómago de una manera sorprendente. Y elevados también, desde luego, por la euforia de un concierto como fue el concierto de Radiohead ayer, ya saben esa sensación después de los conciertos.

Salimos y a encontrar la manera de regresar a donde habíamos dejado la camioneta. Una hora fácil. Pero ya ahí ya no me importaba yo el concierto ya lo había vivido y B. estaba a mi lado así que no tenía nada de que preocuparme.

Llegando al estacionamiento, acordamos pasar por un café o algo porque la caminada ya empezaba a sentirse en el cuerpo.

Y para agrado de muchos, no sé quien haya sido el genio que dijo que un Krispy Kreme debería tener drive thru, y que además ese drive thru permaneciera abierto las 24 horas, pero seguramente ese hombre o mujer ya tiene buen karma como para que sus nietos vivan sin trabajar.

Autopista, todo perfecto después de un café y el sugar rush de una dona, hasta que…misteriosamente a las 2.3o y pico de la madrugada en la Marquesa filas de autos parados, WTF?

Sí, una media hora los carros completamente estacionados sin movernos. ¿Y eso por? Bueno twitter al rescate, supuestamente hubo un choque masivo, pero también supuestamente estaban instalando (¡¿Más?!) anuncios nuevos en la autopista. ¿Cuál fue el motivo? Who knows…! Ya cuando avanzamos yo no vi nada, ni gente instalando anuncios, ni choques espectaculares, bu!

Ya para entrar a la casa y como si toda la odisea no hubiera sido suficiente, nos cierran avenida tecnológico para pavimentar. Ya habíamos practicado mucho la resignación en esa tarde asi que la vueltita extra nos salió bastante bien.

Por fin casa, y como no queriendo la cosa, la pequeña M. se quedó despierta hasta esa hora, evidentemente esperándonos. Y a mí nunca nadie me había esperado despierto de madrugada a que llegara.

*recupera el aliento* Así fue, moraleja: encontrar -especialmente a alguien que no conoces en un concierto de poco menos de 50,000 personas, no es viable.

Tampoco es viable confiar en que la telefonía celular tenga capacidad para que puedas hacer y recibir llamadas en esos momentos.

A la próxima, recuérdenme que no lleve tenis de tela a menos que haya un pronóstico para un día perfectamente soleado.


Reportó para ustedes desde la comodidad de su cama: Roxine.

miércoles, 18 de enero de 2012

Mirror, mirror on the wall.


La perfecta imperfección.

En la vida no debería de aspirarse al modelo de aparador. Esperar que tu vida sea tan perfecta como se ve la de unos actores en la pantalla, tu cuerpo se parezca al que lleva la ropa en el aparador, tu rostro perfeccionado y pareciéndote cada vez menos… a tí.

Una verdadera pena, un desperdicio de intelecto, de valor propio y de creatividad.

YO creo que cada ser en su perfecta imperfección es justamente la belleza más armoniosa que existe en el universo.

Callar tu esencia humana a través de estereotipos socialmente aceptables: de los mayores crímenes que se pueden cometer!


¿Qué es tan grave como para tan afanosamente intentar esconder lo que realmente somos?