El calendario marca 11/9 (Un buen ejercicio)

Justamente ayer estaba escuchando las noticias (no viéndolas, porque justamente a esa hora es cuando estoy preparando las cosas para el día siguiente, acabando los pendientes de la casa –uy que nice sonó eso- o sólo preparándome algo de cenar) que hoy se cumplen 7 años de los ataques a las torres gemelas de NY.

Hoy llegué a la oficina e hice el obligado comentario cultural del día, tipo efeméride ya saben, y platicando con mis compañeras recordábamos qué estábamos haciendo hace 7 años. Imposible olvidarlo.

¿Cómo eran nuestras vidas hace 7 años? ¿Cuáles nuestras metas, nuestras preocupaciones?

Yo iba en la prepa. Recuerdo que estábamos los mismos amigos de siempre en las jardineras que (tal vez demasiado irónicamente) eran el lugar asignado para fumar.

Un amigo (creo que DC. ya no estoy muy segura) llegó y con su sentido del humor tan negro cómo lo era, nos comentó entre chiste-broma y en serio lo que había pasado. Por supuesto que nadie le creyó al principio.

Una hora después ya estaban las mismas imágenes en todos los noticiarios en todos los canales y éstos a la vez todas las teles de la escuela sintonizando la misma señal, reunidos alrededor de la caja tonta más cercana, en los pasillos, en la cafetería, en las copias. Todos estábamos sorprendidísimos, en shock.

La paranoia se empezó a apoderar no tan poco a poco de cada uno de nosotros a la vez que veíamos en vivo el momento en que el segundo avión se estrellaba contra la segunda torre. Los comentarios corrían en torno a lo que Bush seguramente haría. Yo y mis amigos hubiéramos jurado que la tercera guerra mundial era inminente (si bien no estábamos muy alejados de lo que sería en realidad).

Un día surrealista, cómo pocos. Pero al recordar y analizar también los sentimientos que giraban entonces en torno a mí y contestando mis propias preguntas, pues no, hace 7 años jamás hubiera imaginado que hoy estaría donde estoy.

Hace 7 años mi meta era entrar a estudiar Administración de Restaurantes en el Cessa. Mi mundo giraba en torno a mí, al novio en turno, mis metas y mis sueños. Muy risiblemente mi amor platónico de hace 7 años hace mucho que no lo es más… Y ya que lo pienso bien, es necesario preguntarme: ¿Qué carajos tenía en la cabeza en ese entonces? ¿Mierda? (autogol…)

Hace 7 años jamás hubiera imaginado que 7 años después… estuviera casi (-casi-) en la misma talla que en ese entonces, pero ya con una hija hermosísima de dos años y medio (bye bye esa talla 4ever!) y cargando con el fracaso de un matrimonio (la temida D. word) encima.

Hace 7 años jamás hubiera imaginado que muchos de mis mejores amigos de ese entonces se quedarían en el camino, cada quién tratando de alcanzar sus propias metas… Aún cuando los verdaderos amigos cómo Roja, Sandman y otras personillas importantes que contándolos con una sola mano siguen ahí a pesar de los años y de los desiguales trayectos recorridos. Y más aún cuando en ese entonces muchos de los que ahora están en esa lista, ni siquiera figuraban en mi vida, y obviamente ni yo en la suya.

Hace 7 años, jamás hubiera imaginado que mi hermano hoy ya no estaría más conmigo. Fritz te extraño.

Y no obstante hoy me siento mucho mejor conmigo, más que en ese entonces, soy más segura de mi misma (y sé que puedo/debo serlo aún más) y me siento mucho más linda, mucho más mujer y mucho más atractiva que hace 7 años, sin quererlo involuntariamente nace de mí un tipo extraño de nostalgia por esos ayeres, le temps passé.

Y tú, hace 7 años ¿Qué estabas haciendo? ¿Dónde estabas? ¿Qué pensabas? ¿Cuáles eran tus sueños? ¿Tenías algún amor platónico? ¿Cómo has cambiado desde ese entonces?

Escuchando: Ultra Retro: y es que siempre estamos viviendo de noche… (ni sé quién la canta, ja ja ja)
Mood: Rara… retro… contemplativa.

(Para publicar también en star.ymipollo.com)